#MiaHartley #CDMX

• Diva: Mia Hartley

• País de origen: Colombia 🇨🇴

• Arancel: $5,000

• Servicio incluye: Besos bien dados, oral natural (dependiendo de la higiene) 2 relaciones durante la hora

• Lugar: Villas Patriotismo

• Fecha: 15 de marzo 2025

• Puntualidad: 30 minutos después de la hora acordada (la esperaría toda la vida si fuera necesario)

• Reseña: Desde hace algunos años había visto en twitter a Mia, desagraciadamente nunca logré contactarla. A mediados o finales de febrero, se confirmó en el grupo que se encontraba activa y siendo uno de los regresos que yo más esperaba, no dudé en escribirle.

Intenté agendar con ella a inicios de marzo, lo cual no sucedió. Después de su estadía en Puebla por algunos días supe que regresaba a la Ciudad de Mexico, por ello la contacté de nuevo y agendamos nuestra cita.

El día de nuestro encuentro llegué al hotel con anticipación, bañado y limpio. No obstante, tomé una ducha para recibir a la hermosa medellinense con quien mantuve comunicación en todo momento.

Cerca de las 9:30 p.m. llamaron de recepción para autorizar su ingreso, dos minutos después marcaron de nuevo (me imagino que se equivocaron) no pasó mucho tiempo cuando escuché que tocaron la puerta, abrí y Mia me esperaba muy sonriente, vestida con un top de color blanco y un pantalón azul cielo que hacía resaltar su hermosa figura. Nos saludamos, me abrazó y la invité a pasar; procedí a la entrega del regalo (2 horas, 10 mil) y le ofrecí alguna bebida de su preferencia.

Desde el inicio, Mia me cautivó con su alegria genuina y sencillez, eligió escuchar música electrónica, me abrazó nuevamente y riéndose se levantó el top para mostrarme sus suculentas tetas, iniciamos los besos de lengua para proseguir con un ligero faje (teniendo en consideración que esperábamos su bebida y una vez que llegó) los besos y el faje adquirieron mayor intensidad, se colocó de espaldas y me empezó a bailar, restregándome su enorme y delicioso durazno mientras yo besaba, en particular, su cuello y acariciaba delicadamente su vagina.

Al quitarle el pantalón admiraba su tremendo y torneado trasero, moría de ganas por probarlo, por lo que comencé a hacerle sexo oral y al bajarle poco a poco su tanga de color rosa me percaté de lo mojada que estaba, Mia me dijo, sonriendo y bromeando “ay amor, que húmeda está mi tanguita, tú tienes la culpa”.

Mia tomó una toalla, la colocó en el piso y se arrodilló para succionarme, comenzó de manera sutil, después intensificó la acción hasta atragantarse.

Pasamos a la cama, un 69 fenomenal para dar paso a la penetración, comenzamos de misionero, Mia gemía y al estar frente a frente no parábamos la sabrosa sesión de besos, después coloqué sus piernas sobre mis hombros para seguir penetrándola con mayor intensidad durante un tiempo considerable, tan es así que, sin darnos cuenta ya estábamos al filo de la cama a punto de caernos; paramos un momento y aprovechamos para ajustar el aire acondicionado y refrescarnos.

Mia se dirigió al baño y me llamó “amor, ven un momentico” estando ahí, la miré apoyada en el lavabo y me preguntó ¿amor, cómo me veo así?, ¿te gusta, bebé?, retomamos el candente momento y nos besamos de nuevo, me hinqué para lamer y comerme su durazno, luego comencé a embestirla con fuerza, admirando cómo rebotaba su perfecto trasero.

Ambos nos mirábamos por el espejo, ella me decía “ay amor que rico, que rico papi” “no pares, bebé” frases que permanecerán en mi mente, su dulce voz, ese acento y sus gestos de placer son una experiencia indescriptible.

Pasamos a la cama nuevamente y platicamos acerca de nuestros gustos y sobre todo de nuestra vida personal, un momento muy agradable, reafirmando que Mia es una mujer admirable.

Iniciamos la segunda hora, procedí a hacerle sexo oral por algunos minutos para continuar de perrito, tener a esa mujer en esa posición es un privilegio, Mia no paraba de gemir, después me montó y aproximaba sus tetas hacía mi cara, invitándome a saborearlas, lo cual yo hacía con mucho gusto.

Luego pasamos a vaquerita invertida, Mia lo disfrutaba, sus gemidos eran cada vez más fuertes al igual que sus sentones, en esa misma posición giró un poco y quedó de manera lateral tomándome de la mano, instantes después nos acomodamos para que ella estuviera sentada sobre mis piernas, recostándose sobre mi pecho mientras la penetraba, posición que le encantó, escuchando de nuevo sus intensos gemidos y sus inconfundibles frases “ay, sí, qué rico, amor” “qué rico, bebé”.

Continuamos de cucharita, nuestros movimientos se sincronizaban, justo en este momento ambos estábamos súper calientes compartiendo placer al máximo; se puso en 4 de nuevo, a la postre quedó recostada totalmente mientras los gemidos y la respiración de Mia aumentaban hasta que exploté dentro de ella.

Nos besamos de nuevo, le pregunté la hora y Mia respondió que quedaban 20 minutos, tomamos un poco de agua, charlamos por unos minutos para seguir de perrito atropellado, pasaban los minutos sin que pudiera venirme por segunda vez, sonó la alarma de su celular, y desistí, el tiempo había finalizado, cabe aclarar que Mia nunca me presionó para terminar.

Al final, cada quien tomó un baño, continuamos conversando, le agradecí por el sublime momento que pasamos juntos, nos despedimos con un beso y prometimos repetir.

Las colombianas son guapísimas y las favoritas de muchos (en mi caso no han sido experiencias tan buenas). Mia me dejó maravillado y me hizo confiar de nuevo en sus compatriotas pero la verdad, creo que por el momento, no es de mi interés conocer a otra colombiana que no sea ella.

Mia superó todas mis expectativas, a pesar de ser una de las mujeres más hermosas en el medio, aunado al hype de su regreso, ella es una chica amable, educada, carismática y súper linda. Esta preciosa mujer merece todo lo mejor y todo el éxito del mundo, ojalá continúe triunfando como lo está haciendo.

Coincidir con Mia es una de las mejores cosas que nos pueden suceder en la vida, cuidémosla y tratémosla como se merece y como lo que es, como toda un reina, la reina de Colombia.