

Camila Castillo - Venezuela 🇻🇪 😀 3⭐
Nombre: Camila Castillo - Venezuela 🇻🇪
Ciudad: Querétaro
Lugar: Montecarlo
Fecha: julio 2022
Twitter o Instagram: Sin redes
Arancel: $3000
Imagen (Photoshop): Sí se ayuda en sus pics
Estatura: 1.64 aprox
Accesible (se deja hacer): Es accesible
Oral a ella: No hubo
Besos: Muy buenos, hasta con lengüita
Oral natural: Sí, y muy rico
Tiempo acordado: 1 hora
Actitud: Es amable, normal
Puntualidad: Buena
Atención a los huevos: Los pulió y enceró
Oral con baba: Abundante a mi petición
Anal: No pregunté
Terminado cuerpo: No pregunté
Terminado cara: No pregunté
Terminado boca: No pregunté
Extras: $500 por oral natural
Uso de celular: Después de la relación no lo soltó
Tema de conversación: Equis
Calificación: 6/10
¿Repetirías? Lo dudo
#CandyRank: 🍭🍭🍭
Reseña
Me va a ser difícil llegar a una conclusión, pues tengo sentimientos encontrados sobre este encuentro. Primero explicaré que ya la había visto en twitter hace unos meses, pero lo borró y dejó de anunciarse en LB. La encontré de nuevo en la página esta semana y se me antojó mucho conocerla, para que no se me fuera viva otra vez.
Me dio su info y resolvió mis dudas por whatsapp: $3000 por 1 hora, trato de novios, 1 sola relación, $500 extras por oral sin dependiendo higiene, y $500 extras si quería una segunda relación. Leí un par de referencias positivas, y ya con mi semana planeada para contratar, me animé.
Entró a la habitación, buenísima, menos guapa que en sus pics, pero muy atractiva de todas formas. Platiquita muy equis, me di cuenta que no iba a haber tanta química, pero se me olvidó una vez que empezamos a besarnos y a fajar como amantes calientes. Nos desvestimos mutuamente, me dijo que me acostara en la cama y se lo metió todo a la boca. Iba mentalizado a hacer rendir la única relación incluida en el servicio (además de que casi siempre me echo un solo palo dentro de la hora). La pegué a la manguera un ratote y no puso peros, hacía casi deepthroat, lamidas besos succiones, y dejó toda el área babeadísima. Incluso tomó un break para darse un respiro y tomar agua, antes de regresar a mamar.
Me puse un condón, se me montó encima y me empezó a cabalgar como toro mecánico. Se hacía fuerte de atrás y hacia delante, más duro, más rápido, y sus gemidos más fuertes y más fuertes mientras yo le apretaba las tetas. Se vino, tenía el aliento agitado. Sentí su humedad sobre mi pelvis y hasta en mi panza. Estuvo bien cabrón, y eso que íbamos comenzando. Seguimos cogiendo en esa posición, la tomaba de la cintura para darle embestidas y que sonaran nuestras pieles como aplausos mojados. Se quitó de encima y se colocó de perrito. Trataba de acariciarle el clítoris en esa posición y solo se retorcía y me empujaba la mano. Estuvimos un rato cogiendo así, la tomaba de su nuca, le acariciaba su espalda sudada, le daba unas nalgaditas.