Nombre: Rossmi. - Venezuela 🇻🇪

Ciudad: Ciudad de México.

Lugar: Villas Patriotismo.

Fecha: 10 de octubre de 2019.

Twitter/Instagram: @rossmi_1130

Teléfono: 5548915896.

Telegram: No lo sé.

Arancel: $3000 pesos.

Anticipo: No.

Forma de pago: Efectivo.

Tiempo acordado: 1 hora.

Rostro: Guapa.

Complexión: Voluptuosa.

Imagen (Photoshop): Poco.

Abdomen: Plano.

Tatuajes: Si.

Cicatrices: No.

Estatura: 1.65 aproximadamente.

Accesible (se deja hacer): Muy accesible.

Oral a ella: No le hice.

Besos: Normales, profundos y atascadísimos.

Oral natural. Natural.

Atención a los huevos: Si.

Oral con baba: Si.

Anal: No pregunté.

Terminado cuerpo: No pregunté.

Terminada boca/cara: Si.

Extras: No.

Actitud: Excelente.

Tema de conversación: Diversos, con mucha fluidez.

Puntualidad: Buena.

Uso de celular: No.

Calificación: 10 de 10.

Reseña

Estimados Colegas:

Esta vez contaré cómo fue mi última experiencia con Rossmi. A ella la había visto cuatro veces y desde que la conocí me encantó porque tiene la costumbre de “violar” a los hombres. De la última vez a esta, habían pasado seis meses aproximadamente. Para esta oportunidad me dieron unos antojos bárbaros de verla con tacones, medias y ligueros, lo cual se lo hice saber. Me dijo que con mucho gusto los llevaría para nuestro encuentro.

Llegó un poco antes de la hora acordada, ¡por qué no me habías hablado! Me recrimina cuando me dio un beso y pasó a dejar sus cosas. Inmediatamente se puso lo que le había pedido, no se fue al baño sino que frente a mi se fue poniendo cada prenda. Al terminar se puso frente a mí y me dijo: “te gusta mi amor”. No podía creer lo buenísima que veía. Le pedí que caminara para poder admirar ese cuerpazo, voluptuoso. En este 2019 tenía una forma mucho mejor que ahora, esa es mi percepción.

Bien, después de aquello se me acercó para comenzar con los besos, mismos que desde el inicio fueron un “atascadísimos”. Es de las pocas mujeres que besan a lo “desgraciado”, con demasiada pasión. Su “faje” es “superlativo” pfff Al mismo tiempo que la besaba, le repagaba el “animalón”, pero además le agarraba las "nalgotas".